Fue creado en 1939 merced al altruismo de tres vecinos de esta localidad
el farmacéutico Juan Izquier Monagas, el presbítero José Rodríguez Rodríguez y
el oficial del ejército Vicente Barea Mota, que en esa época inician la
continuidad del tradicional interés existente en Guía, como ya se vio en 1898
con la creación del primer colegio con esta denominación, por la existencia de
un Centro de Enseñanza Media, que facilitara el acceso a los hijos de sus
vecinos al bachillerato.
Por Orden Ministerial de 21 de abril de
1941, el Ministerio de Educación Nacional le concedió al colegio la categoría
de Centro de Enseñanza Media legalmente reconocido, al ampara de la ley de
1938. Desde 1941 a
1944 funcionó el Colegio como empresa privada. Durante esta época los
propietarios hicieron frente a su gestión con una generosidad sin límites, ya
que, las crecientes exigencias del Ministerio, solicitando aumento de plantilla
en su cuadro de profesores licenciados, y el número reducido de alumnos les
hacía cargar con gran responsabilidad por los compromisos adquiridos con los
profesores, tres de los cuales tuvieron que ser contratados en la Península
( Luís Cortí
Vilás, Pilar Cortí Vilás y Encarnación Reverter Roig), que a pesar de dar clase
cada uno de ellos en asignaturas complementarias, tenían en muchas ocasiones
que abonar ciertos gastos de su peculio particular. El ayuntamiento apoyó esta
iniciativa con subvenciones, pero siempre fue insuficiente dado los gastos del
Colegio.
En 1944 los citados dueños del colegio,
expusieron ante la Corporación Municipal,
siendo entonces alcalde Manuel Fernández-Oliva Pérez, lo insostenible de la
situación y como única solución proponían la cesión de todos sus derechos y
obligaciones a favor del Ayuntamiento de Guía.
El entonces alcalde, Fernández-Oliva,
reunió a los familiares de los alumnos y determinadas personas representativas
de la ciudad, a los que les expuso los hechos, y unánimemente todos opinaron
que el Colegio legalmente reconocido “Santa María de Guía” debía
municipalizarse, como así se acordó en sesión del Ayuntamiento Pleno de 24 de noviembre
de 1944 haciéndose cargo el Ayuntamiento del pasivo del Colegio y de cuantos
derechos y obligaciones había contraído su anterior empresa.
Por tanto a partir de esa fecha el
Colegio se convierte en Servicio Público Municipal.
Un nuevo edificio para el Colegio Municipal
En octubre de 1946, el Colegio
Municipal pasaba del inmueble sito en la calle de Médico Estévez número 8, a un espléndido edificio
que el ayuntamiento había adquirido con anterioridad en la calle Sancho de
Vargas al Sindicato Agrícola del Norte, y que una vez adaptado para centro de
Enseñanza, mereció la felicitación de cuantas autoridades académicas lo
visitaron e inspeccionaron.
REPORTAJE DE SERGIO AGUIAR SOBRE LA EDUCACIÓN EN GUÍA