Inicio arrow Prosa arrow Psicografias. Santiago Gil arrow Nispereros. Santiago Gil Ciudad de Guía, 25 de abril de 2024

PDF Imprimir E-Mail
Calificación del usuario: / 0
MaloBueno 
lunes, 20 de abril de 2009
PSICOGRAFÃAS
“Los nispereros ya no son saqueados por los niñosâ€

Nispereros

Santiago Gil


Hace unos días escribía sobre el protagonismo de las palmeras en cualquier fotograma que recuerde nuestro paisaje más cercano y reconocible. Pero no sólo es la palmera la que se cuela en los horizontes que se vienen con nosotros cuando estamos lejos, o cuando hace mucho tiempo que no regresamos a casa. También están los dragos, los pinos, las araucarias o las higueras. Y aquellos laureles de indias de todas las plazas en las que aprendimos a volar sobre una bicicleta o a dar patadas a las chapas, a las pelotas o a cualquier piedra que se tropezara con unos zapatos que sólo sabían correr en busca de aventuras. Pero creo que el árbol que mejor conserva el sabor de la infancia es el nisperero. Cada cual puede optar por el suyo. Todos tenemos un nisperero por el que trepábamos en busca de la rama más alta y del níspero más alejado de nuestros dedos liliputienses. Compartíamos con los pájaros la inmensidad del cielo azul que quedaba lejos, más allá de la fruta y de los deseos. Durante varias semanas al año sólo concebíamos la vida en las alturas. No sé cuándo decidimos quedarnos para siempre en el suelo. Ahora que podríamos subir más alto, ni siquiera estiramos la mano para ver si es verdad que los sueños se cogen siempre al vuelo.

La infancia tenía sus ciclos y sus leyes no escritas en ninguna parte. Sólo el colegio era capaz de separarnos de la bendita anarquía de los barrancos y de aquellas aventuras improvisadas que nos llevaban de los carros de cojinetes a las hogueras antes de que nos perdiéramos siguiendo el rastro de una cometa de papel cebolla que improvisábamos al final de la tarde. Era otra infancia y otra calle. Casi no había coches que pararan los partidos de fútbol de quince contra quince en los que cada gol nos volvía eternos y grandiosos, y en donde no hacían falta ni árbitros ni jueces para poner orden en el juego. Entonces los niños de pueblo y de ciudad nos diferenciábamos poco. Coincidíamos en un solo canal televisivo, pero jamás cambiábamos la tele por la improvisación festiva de la calle. Por eso los niños de hoy se aburren tanto: han perdido la calle y toda aquella enseñanza diaria de la vida que uno encontraba compartiendo juegos. Apenas conocíamos la virtualidad, y puestos a elegir, preferíamos siempre el sabor de los nísperos al más sofisticado juguete tecnológico.

Pero los nispereros ya no son saqueados por los niños. Van pasando las semanas de marzo y abril y uno ve cómo los nísperos se pudren en los árboles sin que aparezca nadie a darse un festín. El níspero es una fruta para los furtivos y los aventureros, pero presiento que los niños de este siglo veintiuno están confundiendo la aventura con la videoconsola. Y sin saberlo, están dejando de saborear su propia infancia: el almíbar del que luego se alimentan los recuerdos.

CICLOTIMIAS

Provengo del mundo del periodismo; por tanto tengo muy presente que todo es efímero, incluso lo que queda escrito.



Esta dirección de correo electrónico está protegida contra los robots de spam, necesita tener Javascript activado para poder verla

MI BLOG: www.
santiagogil.com


PUBLICADO EN CANARIAS7


Modificado el ( lunes, 20 de abril de 2009 )
 

ESPECIAL 1811-2011

En 1811 regía el pueblo, en calidad de Alcalde Real, don José Almeida Domínguez, y destacaban como figuras preeminentes nacidas en Guía tres nombres propios que han pasado a la historia de Canarias: el escultor José Lujan Pérez, el canónigo y diputado Pedro José Gordillo, y el militar y poeta Rafael Bento y Travieso.

Por otro lado, de todas las epidemias que azotaron las islas Canarias en el siglo XIX, Guía sufrió especialmente ese mismo año una de las que causaron mayores estragos, la fiebre amarilla.

Y por si fuera poco, en pleno padecimiento de los efectos de la epidemia apareció una nueva plaga, la de langosta, que arrasó materialmente todo lo que estaba plantado y que hizo protagonizar a los vecinos de las medianías guienses aquella famosa promesa de que si les libraba el Cielo de la plaga, cada año sacarían a la Virgen de Guía en procesión. Cumplióse el ruego, llovió tanto en la comarca que las aguas acabaron con la cigarra y desde entonces en Guía se celebra cada septiembre la votiva y popular Fiesta de "Las Marías"

Ver reportaje >>


O P I N I Ó N
Virgen de Guía: razones históricas para una coronación canónica

Por Pedro González-Sosa

El obispo de Canarias, Francisco Cases, procederá el domingo a la coronación canónica de la venerada imagen de la Virgen de Guía, patrona de aquella localidad desde el momento mismo en que Sancho de Vargas, a finales del siglo XV, funda la que en principio fue simplemente villa y desde 1871 Ciudad. Logran, al fin, los vecinos de aquel pueblo -que es también el nuestro- la vieja aspiración que va más allá del tiempo que se ha aireado en el último año según el cual la idea partió al conocerse que el pasado 2011 se cumplían los 200 años de la promesa votiva que dio origen a la tradicional fiesta de "Las Marías".
Leer más...